Raviolones deliciosos con salsa de salvia

Estos raviolones quedan espectaculares con este relleno. Es un plato ideal para un almuerzo o cena especial.
Se pueden acompañar con varias salsas pero que sean suaves y permitan apreciar bien la masa y el relleno de los raviolones.
En este caso se perfumaron con una salsa de salvia a la manteca.

Porciones: 6

INGREDIENTES
Masa
3 y 1/2 tazas de harina ( 420 gramos )
1 cucharada de pimentón dulce
3 huevos

Relleno
1 taza de acelga cocida y exprimida ( 150 gramos )
2 tazas de brócoli cocidos y picados ( 210 gramos )
1 zanahoria cocida entera ( 120 gramos )
1 taza de queso parmesano rallado ( 100 gramos aprox. )
1/2 taza de pan rallado
1 huevo
50 gramos de salame picado
1 lata chica de sardinas
3 cucharadas de aceite de oliva
sal, pimienta, nuez moscada

Salsa de salvia a la manteca
100 gramos de manteca ( mantequilla )
un puñado de hojas de salvia

PREPARACION
Poner la harina en la mesada previamente mezclada con el pimentón.
Hacer un hueco en el centro e incorporarle los huevos. Trabajar con la punta de los dedos hasta incorporar la harina a los huevos.
Para terminar de armar la masa se le agrega una o dos cucharadas de agua, siempre una mínima cantidad para que la masa no se humedezca demasiado.
La masa debe costar armarla y debe quedar con una consistencia bien firme.

Se amasa durante unos minutos hasta que quede lisa y sedosa. Se deja descansar media hora cubierta con papel film o con un paño.

Relleno
Relleno. Poner en el vaso del procesador, la acelga, los brócoli, la zanahoria cortada en rodajas, el queso, el huevo y las sardinas.
Procesar hasta formar un puré. Poner esta preparación en un bol.
Agregarle el salame picado bien chico, el pan rallado, el aceite de oliva y mezclar.
Probar y agregarle los condimentos que se necesiten de acuerdo al gusto de cada uno.
Una vez terminado el relleno se lleva a la heladera unas horas para que al enfriarse tome cuerpo.

Estirado de la masa. Cortar la masa en porciones para que resulte más fácil estirarla.
Se enharina el palote y un poco la mesada.
Se forma un bollo con una de las porciones se apoya sobre la mesa de trabajo y se aplana con las manos.
Se va estirando con el palote en forma pareja, comenzando desde la mitad de la masa hacia la parte superior y dándole forma rectangular.
Una vez estirada esta parte se gira y se estira la otra mitad. Este sistema de estirado permite quebrar mejor el gluten y lograr que los bordes no se contraigan.
Poco a poco la masa comenzará a ensancharse e irá tomando la forma y el espesor deseado, 2 a 3 milímetros.
Una vez estirada, marcar la mitad del largo de la masa.

Armado de los raviolones. Retirar de la heladera el relleno y colocarlo en una manga deshechable.
Formar montoncitos de relleno en hilera calculando que cada raviolón tiene aproximadamente 6cm. de lado.
Preveer que el raviolón tiene un tamaño considerable por lo tanto el relleno debe ser proporcional a su tamaño.
Formar dos hileras, tomar un pincel y mojarlo apenas con agua. Pincelar la parte de la masa que está sin relleno.
Tomar la otra mitad de la masa e ir encimándola en forma holgada, presionando con los dedos todo el contorno donde está el relleno para quitar el aire.
Terminar de pegar ambas masas haciendo presión con los dedos. Marcar los raviolones con la ruedita.
E ir acomodándolos en una mesa enharinada o espolvoreada con sémola de trigo.

Repetir lo mismo con el resto de la masa.

Opciones. Una vez todos armados se pueden cocinar o bien guardarlos crudos en el freezer.
Para cocinarlos se retiran del freezer y se vuelcan directamente en agua hirviendo hasta que estén cocidos. No se dejan descongelar.

Cocción de los raviolones. Cocinarlos en abundante agua hirviendo con sal y con la olla destapada.
Una vez que suben a la superficie se dejan unos minutos y se van retirando con una espumadera grande.

Salsa. Se pone en una cacerola chica la manteca cortada en trozos.
Se lleva al fuego y se deja hasta que esté derretida. Se agregan las hojas de salvia picadas, se dejan un momento y se retiran.

Presentación del plato. Se distribuyen los raviolones en los platos.
Se vuelca en el centro un poco de salsa de salvia y se espolvorea algo con un buen queso